El proceso contra el presidente del Tribunal de Mayor Riesgo “C”, Pablo Xitumul, sumó una anomalía más. El juez pesquisidor, Eduardo Galván, quien debía evaluar si había indicios para una investigación, sugirió a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) que se le retire el antejuicio, pero ni siquiera lo escuchó. Con esto se viola el derecho de defensa de Xitumul.
Ahora el caso pasará al pleno de la CSJ donde posiblemente este miércoles se decidirá si Xitumul queda sin inmunidad por un caso lleno de anomalías donde parece que se busca venganza contra el juzgador por los casos donde ha dictado sentencia.
Xitumul informó que la semana pasada Galván no aceptó las pruebas presentadas por eso el juez presentó un informe a la CSJ, pero le notificaron que el informe de Galvan se aceptaba no importando este hecho.
El caso contra Xitumul nació después que él fue víctima de agresión física y verbal por parte de un agente de la PNC. El juez lo denunció, pero el agente recontra demandó. El Ministerio Público aceleró el proceso y solicitó el antejuicio contra Xitumul. El juzgador ha dictado sentencia en casos como el juicio contra Rios Montt o Roxana Baldetti.
La CSJ además conocerá pronto otro proceso contra la jueza Erika Aifán y observadores del sector justicia creen que se trata de un ataque contra jueces independientes.