Tan sólo unos días bastaron para que la nueva fiscal a cargo del Caso Odebrecht iniciara a cometer anomalías y revelar información reservada dentro de un proceso que será utilizado para la venganza de Consuelo Porras contra el exfiscal Juan Francisco Sandoval.
El pasado 23 de septiembre se dio a conocer que Vilma Pérez Pineda había sido nombrada como fiscal especial del caso. Cuatro días después la jueza de mayor riesgo D, Erika Aifán, informó que enviará un oficio a la Fiscal General para informar que Pérez Pineda reveló información bajo reserva a uno de los abogados defensores del caso. Algo que está prohibido.
La Fiscal Especial dio a conocer datos privados de un testigo del caso lo que pone en riesgo la vida de este y también el proceso.
El caso Odebrecht ha tomado relevancia después que personas vinculadas al pacto de corruptos exigieron a Consuelo Porras que activara el caso; después Porras nombró a la fiscal especial y por último ha sido el propio Presidente Giammattei quien ha hablado del caso.
La información filtrada por parte del netcenter es que habrá una acusación contra el exfiscal Sandoval argumentando vicios en el proceso al aceptar un trato con la compañía. Sin embargo este fue aprobado por un juzgado y tuvo conocimiento la Procuraduría General de la Nación (PGN), pero no se opuso al mismo.
En este caso están acusado los excandidatos presidenciales Manuel Baldizón y Alejandro Sinibaldi quienes junto a cómplices recibieron dinero a cambio de otorgar obras públicas.